Año: 2014
ICONOFOBIA:
¿Cómo se representa la violencia en la sociedad actual? ¿Cuál debería ser su representación válida?
Resulta excesiva la atención que los medios de comunicación de masas ofrecen sobre el hecho violento. Esta desbordante atención convierte a la mirada en pornográfica, en el momento en que busca en las imágenes el detalle escabroso y macabro.
Esta mirada insensibiliza y evita cualquier reacción dialéctica ante el hecho violento, evita lo racional y desarrolla el miedo, evita el diálogo y la empatía y desarrolla el credo sin paliativos.
Mas allá de la violencia como hecho antropológico, a lo que nos enfrentamos es a la violencia sistemática y ubicua del estado moderno, a su utilización por cualquier forma de poder y al papel que en ello juegan los medios de comunicación.
¿Es entonces, quizás, el poder del arte el único vértice que puede llamar la atención sobre estas relaciones de dependencia entre violencia-poder-massmedia? ¿Es tal vez el arte el único que puede desestabilizar la mirada insensibilizada, el único que puede poner en evidencia el régimen escópico que hemos construido?
Quizás el hecho de que la imagen en el contexto-arte sea menos real, o más elaborada, pictórica al fin y al cabo, extrae un significado que se escapa cuando la vemos en otro contexto. Evidencia la construcción pública de la violencia.
¿Por qué nos impactan tanto este tipo de imágenes cuando salen de la ficción? ¿Por qué escandaliza menos la imagen de un cadáver vista en el telediario que en el cine? ¿Por qué resulta menos epatante, menos violento, el hecho que su representación plástica?
La capacidad evocadora de estas imágenes, la velocidad a la que se nos presentan -ya provengan de una pantalla u otra-, y la manera en que las fagocitamos, hacen de estas material imprescindible para la sociedad del espectáculo. No hay acontecimiento sin la creación de su universo iconográfico, y tan potentemente unido a éste que cualquier indicio nos retrotrae en línea directa al referente.
Afirma Susan Sontag que las fotografías (sensu lato, imágenes) ejercen un poder incomparable en determinar lo que recordamos de los acontecimientos, y han sentado las bases sobre las que se juzgan y recuerdan los conflictos importantes. Pero también se han convertido en la Palabra. Sontag habla de las fotografías hechas por soldados estadounidenses en la prisión iraquí de Abu Ghraib como muestra del cambio del uso de las imágenes, de objeto de conservación museística han pasado a ser mensajes que han de circular. La reacción del gobierno consistió en afirmar que estaba indignado y asqueado con las imágenes, como si la falta o el horror recayera en ellas y no en el hecho que exponen.
Desvelar la capacidad constructora de la imagen en el hecho violento, señalar latendenciosidad de nuestra mirada, evidenciar la relación que existe entre la violencia y los medios de comunicación, y cómo recibimos, a partir de la imagen, los hechos angulares de la historia contemporánea, es el objetivo de este proyecto pictórico.
A partir de varias series de cuadros de distintos tamaños, dedicados a diferentes representaciones de hechos mediáticos recientes -de ese constructo llamado actualidad-, Leto se propone mostrarnos, a partir de acontecimientos que son sin duda terribles, el hecho de que a veces las imágenes -el signo-, nos atrapan y convencen más que el hecho -su referente-.
Pilar Cruz